Los primeros pasos siempre son los más difíciles, aunque estos han sido firmes. Conociendo ya el contenido del proyecto, mis alumnos/as elaboraron un listado de actividades que podían ofertar y otro listado de aquellas otras que les gustaría aprender (ofertas y demandas) rellenando la tarjeta correspondiente. Decidimos utilizar una de las paredes del aula para exponer las ofertas y las demandas de cada uno, siendo la información más accesible para todos en esta ubicación.
Antes de comenzar la actividad en tutoría, estipulamos que el intercambio de conocimientos, talento y habilidades sería en pareja (una demanda-una oferta), siempre que existiera el interés por aprender lo ofertado. Los alumnos se encargaron de adquirir el material que necesitaban y tras presentarme el vale de compra correspondiente para abonarles el importe, todo estaba preparado para realizar la actividad.
Llegó el día esperado y... ¡participaron todos los alumnos/as!, con:
.- Enseñar a jugar al ajedrez y a las damas.
.- Enseñar a hacer figuras y muñecas de fieltro.
.- Enseñar a hacer pulseras de cordón, pulseras con hilos y pulseras de piezas de colores.
.- Realizar llaveros con figura de cocodrilo.
.- Modelar y pintar figuras del portal de Belén en arcilla.
A partir de entonces, en las horas de tutoría y tras abordar temas puntuales y cuestiones del Dpto de Orientación, dedicamos nuestro tiempo a esta actividad. También se pueden utilizar las horas de guardia, siempre y cuando el profesor/a correspondiente se lo permita.
